Mi aventura Erasmus+ en Lucca fue una experiencia transformadora, desde el primer día cuando nos reunimos en el aeropuerto de Barajas, cuando veía llegar al resto de compañeros, que a la mayoría no conocía y que tanto iba a compartir con ellos, que sensación tan bonita.
Ya al llegar allí explotamos de alegría, ¡ya estábamos en otro país!, con lo que eso conlleva aunque sea cercano y con raíces culturales similares es otro idioma, otra cultura, otra historia, siempre es maravilloso comprobar que haciendo un esfuerzo te puedes entender con su gente, sumergirte en su cultura y más una ciudad como Lucca en la Toscana italiana que te recibe con una majestuosa muralla renacentista, peatonal en su parte superior, que rodea la ciudad con unos 4 kilómetros de paseo, con unas bonitas vistas a la ciudad desde donde se pueden observar sus muchas torres.
Qué bonito ir en grupo, sentir que todos están para ti y tú para todos, sabedores de que algo iba a cambiar en nuestras vidas. Hubo tiempo para todo, visitas culturales como la catedral el Duomo di San Martino, que se mandó construir en 1063 teniendo varias modificaciones hasta 1637, subimos a la torre del campanario, ¡increíbles vistas! Como también a la torre de Guinigi con su peculiar jardín en su parte superior y algunas encinas.
Visitamos el centro de estudios de adultos CPIA, experiencia única el mezclarnos en una clase de italiano para extranjeros, con diversas nacionalidades, que gracioso e interesante intentar entenderse con personas de hablas tan diferentes.
También, como no, hubo tiempo para comer y charlar tranquilamente con los compañeros entorno a una mesa con productos típicos, como pueden ser sus quesos, pasta fresca con formas y salsas diferentes a cuál más buenas y sus tan conocidas pizzas. Esos ratos compartidos con los compañeros tomando un café o una cerveza a media tarde para hidratarnos un poco entre los más de 20.000 pasos diarios.
Las tranquilas tertulias nocturnas con una copa de vino Chianti de la Toscana, al final del día contando nuestras vivencias nuestras sensaciones o esos desayunos exprés después de otro madrugón preparados para otro día lleno de aprendizaje, no nos podíamos dejar nada sin visitar queríamos empaparnos de Italia.
Estos y muchos más momentos,¡ los llevo conmigo!
Javier de Gregorio N2 Semipresencial
Estoy encantada de haber compartido contigo está aventura y con los demás compis. hemos hecho un buen equipo, al igual con Isabel y Antonio. estoy muy agradecida y contenta . Viajar abre mente y mundo .
ResponderEliminarQue maravilla que lo pasarais tan bien.
ResponderEliminarLeticia
EliminarSuscribo lo dicho Javi.
ResponderEliminarY un placer compartirlo contigo
Una experiencia increíble